El montaje de la noche
Por Juanca
Acerca del montaje
Para filosofar seriamente sobre el montaje es importante, en principio, liberarnos del chiste burdo acerca de su significado. Pensemos en él en su acepción cinematográfico y no en su sentido equino y vulgar (montarse una yegua, etc.).
El montaje implica, entonces, un movimiento capaz de combinar, yuxtaponer, vincular elementos que no necesariamente estaban relacionados entre sí para darles una forma o lógica que antes no tenían. Es decir que crea relaciones nuevas entre los elementos entrelazados. Esa composición, una vez concluida, dará la ilusión de encerrar sentido.
Un ejemplo sencillo es pensar en un cuadro. Tenemos un lienzo blanco, en él dibujamos un tractor flotando en el mar muerto conducido por un potus de mimbre. ¿Qué sentido puede encerrar esto?, se preguntarán. Pues podría significar una representación de lo absurdo, o un pintor con mal gusto, o simplemente la intención del autor de causar malestar estético en el espectador. El sentido depende del ojo, individual y colectivo, que lo observe, un ojo que a su vez se modifica a través del tiempo.
Comida, noche, sexo, son elementos que han sido combinados infinidad de veces. El punto radica en hacerlo de una manera original, que logre conformar un concepto novedoso.
Una vez aclarado este punto vayamos directamente a la noche que Pierre nos propone armar para hoy.
“Está como para presentarla en casa”
La idea que se deduce del título es “esta mina nos interesa”, a tal punto de querer presentarla en sociedad (léase familia, amigos). Es decir, sin vueltas, que da para ponerse a noviar.
Antes que nada hay que tener en cuenta que, para que la susodicha acepte venir a comer a casa, hay cosas que ya debemos tener cocinadas en un sentido no gastronómico, de lo contrario declinará nuestra invitación.
Por ende hay situaciones previas que modifican y predisponen de maneras distintas.
A saber:
- ya hubo acercamiento físico pero no sexo (desafío)
- ya hubo sexo (relajo)
- es el primer encuentro y aceptó (a remarla)
- “aceptó porque es una vieja amiga pero la quiero de novia”
(complejidad total, se recomienda mucho tacto en sentido
figurado, NO LITERAL)
Dependerá de cada una de estas situaciones el desarrollo de la noche. La cuestión está en cortejar a la chica siguiendo los pasos de Pierre, que calza 44, si lo que queremos es ir más allá del sólo hecho de tener sexo, que es la propuesta de hoy. Para los que sólo quieren tener sexo proponemos nos escriban con las especificidades del caso, que ya habrá montajes especiales para ello y sólo ello.
Propuestas para futuras noches:
-en el laburo hay una fea que me calienta
-le quiero dar bomba a una vieja amiga
-le quiero dar bomba a una vieja
-cumplo años de noviazgo con mi novia hippie, punki, cheta, intelectual, etc.
-la vecinita de enfrente me tiene loco, loco
...eso y todo lo que necesites para el montaje que quieras armar!!!
Escribinos a cocinandoconpierre@gmail.com